Mechitas, claritos y reflejos: Consejos para animarse a ellos

Si se trata de renovar el look, no hay nada mejor que recurrir a los tintes de cabello. Pueden ser unas pocas mechas, algunos claritos, reflejos en el pelo o bien toda la cabeza pero lo importante es desafiar nuestra personalidad con un color ajeno al propio, animarse a jugar con nuestro aspecto para así descubrir otra parte de nosotras.

El problema es que… ¿es un salto al vacío? Una puede verlo de esa forma si no investiga el proceso y se lanza a la aventura sin pensar en las consecuencias. Pero también es posible saber en que arenas caminaremos antes de atreverse a un tinte de pelo.

Antes que nada, debes saber que no es un viaje de ida sino que siempre puedes regresar a tu color si no te gustan los resultados. Si se trata de un color no demasiado diferente al tuyo, puedes recurrir a un nuevo tinte de tu color o bien al clásico tono sobre tono que permitirá que luzcas una cabellera con un tono similar al propio mientas tu cabello crece y regresa el color natural.

En el caso de optar por un rubio platinado, debes tener en cuenta que supone un mayor riesgo pues la decoloración daña el cabello por lo que hay que cuidarlo más que de costumbre aplicando mascarillas una vez a la semana para así nutrirlo. También se recomienda una mascarilla de aceite antes de los lavados y el uso de acondicionador con la intención de alisar la cutícula.

Si quieres platinar el cabello pero tienes rulos, debes recordar que es mejor evitar las planchitas pues añaden un mayor daño al cabello. Por otra parte, hay que saber que con una decoloración furiosa te vuelves esclava de las peluquerías pues si deseas que tu melena esté prolija deberás retocar las raíces al menos una vez a la semana.